El jefe del área de pediatría del Hospital Roosevelt, Ricardo Menéndez, contabilizó 15 casos de niños que han sufrido heridas por quemaduras que causan los juegos pirotécnicos. El especialista brindó detalles sobre los accidentes registrados en esta temporada de fiestas de fin de año. Según el médico, en lo que va de la temporada ya se han contabilizado más de 15 infantes afectados, entre ellos un fallecido, a causa de la mala manipulación de pólvora.
Menéndez resaltó que lo más grave ocurrió el pasado martes a la 1:30 horas, cuando rescataron a un pequeño con quemaduras en todo el cuerpo. “El niño fue trasladado de manera técnica por los Bomberos Voluntarios, pero ya venía en condiciones críticas”, lamentó.
20 heridos por explotar una bomba de trueno, en el interior de una iglesia ubicada en la comunidad Oxlajuj, Santa Lucia La Reforma. Totonicapan. pic.twitter.com/vMxTWciZrG
— Bomberos Voluntarios (@BVoluntariosGT) December 14, 2024
El especialista agregó que el pequeño llegó acompañado de su padre, pero lamentablemente falleció el miércoles a la 1:00 de la madrugada. El médico señaló que, en muchos de estos casos, se observa irresponsabilidad por parte de los adultos encargados del cuidado de los niños.
“Hemos notado que uno de los factores es el consumo de alcohol, que lleva a la indolencia de los padres o familiares”, expresó el galeno. Añadió que muchas personas adultas permiten que los niños manipulen juegos pirotécnicos sin la supervisión adecuada, creyendo que nunca les pasará nada.
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Recomendaciones para cuidar a los niños
Menéndez compartió algunas recomendaciones importantes que incluyeron el uso de los «cuetillos» de la época. “Si se van a usar juegos pirotécnicos, deben estar con tutela de una persona responsable, no de alguien bajo efectos del alcohol o sustancias”, enfatizó.
El experto advirtió que el incremento en los casos de niños quemados puede traer graves consecuencias, como lesiones permanentes.
“La manipulación irresponsable de la pólvora puede causar amputaciones de dedos, quemaduras graves en las manos y daños irreversibles en los ojos. Estas secuelas pueden marcar a los niños de por vida”, explicó.
Además, el médico relató que han atendido casos donde la ropa inflamable agrava las lesiones.
“En un caso reciente, un niño vestía ropa hecha de material inflamable y sufrió quemaduras severas. También hemos observado que las luces chinas, muy vendidas en esta época, generan riesgos significativos, como lesiones en el rostro y los ojos. Igualmente, las bombas pirotécnicas aumentan el riesgo de lesiones graves”, lamentó.
Finalmente, Menéndez destacó las tres principales causas de quemaduras en menores de edad en Guatemala durante la época de fin de año:
- Líquidos calientes, como alimentos que se cocinan en recipientes grandes,
- Mala manipulación de pólvora,
- Quemaduras causadas por rayos o escapes de motocicletas”.
Con información del periodista Lester Ramírez