El rapero perdió la vida a los 51 años tras una prolongada y valiente lucha contra el cáncer de páncreas.
El cantante estadounidense D’Angelo, el pionero de neosoul que alcanzó la fama en la década de 1990 y principios de la de 2000 con una innovadora y sensual versión del R&B, falleció a los 51 años.
La noticia fue dada a conocer a través de un comunicado publicado por su familia, según un comunicado de su familia, donde piden que se respete su privacidad e invitaron a unirse en el duelo por el fallecimiento del cantante.
"La estrella brillante de nuestra familia ha apagado su luz en esta vida... Tras una larga y valiente batalla contra el cáncer, nos duele anunciar que Michael D’Angelo Archer, conocido por sus fans de todo el mundo como D’Angelo, ha sido llamado a casa, dejando esta vida hoy, 14 de octubre de 2025″, revelaron sus familiares en un comunicado público.
"Nos entristece que solo pueda dejar recuerdos entrañables con su familia, pero estamos eternamente agradecidos por el legado de música extraordinariamente conmovedora que nos deja", agregaron.

Muere D'Angelo Instagram
RCA, su disquera de toda la vida, también emitió un comunicado diciendo que estaban "profundamente entristecidos" por su fallecimiento.
"Fue un visionario sin igual que fusionó sin esfuerzo los sonidos clásicos del soul, funk, góspel, R&B y jazz con una sensibilidad de hip hop", decía el comunicado. "La composición, el talento musical y el inconfundible estilo vocal de D’Angelo han perdurado y seguirán inspirando a generaciones de artistas por venir".
Su carrera
Nacido como Michael Eugene Archer en Richmond, Virginia, D’Angelo era hijo de un predicador pentecostal. Al crecer en la iglesia, su talento musical fue descubierto desde temprano.
D’Angelo fue un importante exponente del neo soul. Debutó en 1995 con su álbum Brown Sugar y en 2000 lanzó uno de sus discos más famosos, Voodoo, con la canción Untitled(How Does It Feel) que le valió dos premios Grammy —mejor álbum y mejor interpretación masculina, ambos en el género R&B— en 2001.
Tras una época fuera del espacio público por problemas de alcoholismo, pérdidas de seres queridos y de un rechazo por su parte a la imagen sexualizada que se le atribuyó por el vídeo de Unititled, reapareció en 2014 con su tercer álbum, Black Messiah, con el que ganó un Grammy al mejor álbum de R&B y la mejor canción del mismo género por Really Love.
En su carrera, tuvo un total de 14 nominaciones al reconocido premio musical.