El recordado intérprete de Walt en la famosa comedia perdió la vida a los 70 años tras terribles complicaciones de salud. Descubre los detalles de su trayectoria y lo que enfrentó en sus últimos años.
René Kirby, conocido por su entrañable papel como Walt en la comedia Amor ciego (Shallow Hal), falleció a los 70 años en el University of Vermont Medical Center, tras una prolongada hospitalización de dos meses.
La noticia fue confirmada por su familia y medios estadounidenses, destacando que su estado de salud se vio afectado por una serie de complicaciones en órganos vitales.
René Kirby Redes sociales
Nacido el 27 de febrero de 1955 en Burlington, Vermont, Kirby afrontó toda su vida los desafíos de la espina bífida, una malformación congénita de la columna vertebral que impidió el uso de sus piernas.
Desde niño aprendió a desplazarse utilizando sus manos y más tarde condujo un triciclo adaptado de tres ruedas. A pesar de las limitaciones, se destacó como nadador, gimnasta con títulos estatales, esquiador y carpintero, y dedicó más de 20 años a trabajar en IBM.
Su salto al mundo del cine se produjo gracias al director Peter Farrelly, quien lo descubrió en Burlington en 1999 y creó el personaje de Walt en Shallow Hal para reflejar auténticamente a una persona con espina bífida.
Su simpatía y autenticidad en la pantalla lo convirtieron en una presencia inolvidable junto a Jack Black y Gwyneth Paltrow. Posteriormente, apareció en Stuck on You (2003) como Phil Rupp y en la serie Carnivàle en 2005.
Kirby también sobrevivió a un cáncer de garganta, cuyo tratamiento requirió la extirpación de su laringe, dejándolo sin voz en sus últimos años. Durante su hospitalización enfrentó infecciones múltiples y complicaciones en el esófago, los riñones y la vejiga, lo que finalmente derivó en su fallecimiento.
Su hermano Jon Kirby expresó que René lo inspiró con su filosofía de vida: "Él me mostró que no hay límites sobre lo que cualquiera puede hacer", y recordará siempre una de sus frases más emblemáticas: "No hace falta ser fuerte para destacar".
Aunque su carrera cinematográfica fue breve, el legado de René Kirby trasciende sus actuaciones. Fue un ejemplo de perseverancia, inclusión y dignidad, demostrando que las barreras físicas no determinan el valor de una persona.
En redes sociales, fans de Amor ciego han recordado su papel con cariño, compartiendo escenas memorables y destacando la fuerza de su espíritu.
René Kirby deja un legado imborrable: su vida, marcada por la resiliencia ante desafíos extremos, y su presencia en el cine, que abrió espacios para la representación auténtica de personas con discapacidad.
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