Las recientes inundaciones en el este de España, principalmente en la región de Valencia, han causado una profunda tragedia humana, con más de 200 víctimas mortales y decenas de personas aún desaparecidas. Ante esta situación de emergencia, muchos esperaban que La Liga, una de las ligas de fútbol más importantes del mundo, suspendiera por completo la jornada 12 como muestra de respeto y solidaridad con los afectados. Sin embargo, la competición decidió mantener la mayoría de los encuentros programados, a excepción de los que se celebrarían en la Comunidad Valenciana. Esta decisión ha desatado controversia y ha generado críticas por parte de entrenadores, jugadores y la opinión pública.

Desde la directiva de La Liga, Javier Tebas, presidente de la organización, ha sido uno de los principales defensores de la continuidad de los partidos en el resto del país. Tebas explicó que el mensaje que buscan transmitir no es detener las actividades deportivas, sino, al contrario, mantenerse en la primera línea laboral como un símbolo de unidad. “Creemos que en la terrible situación que estamos viviendo en España, el mejor mensaje no es parar, salvo en las zonas afectadas. El mejor mensaje es estar en primera línea en nuestros puestos de trabajo como todos los trabajadores del resto de sectores”, escribió Tebas en su cuenta de Twitter.

#LaLiga | Varios jugadores y entrenadores han mostrado su molestia con La Liga, por la decisión de jugar la jornada 12 a pesar de la devastación causada por las graves inundaciones en la región de Valencia.https://t.co/8BRoZUeqW4

— Emisoras Unidas Deportes (@EUDeportes) November 2, 2024

Las razones detrás de la decisión de LaLiga

Esta postura busca resaltar el fútbol como una herramienta de visibilidad y solidaridad en tiempos difíciles. LaLiga considera que suspender los partidos en todo el país limitaría el impacto de la ayuda y las campañas de donación. En lugar de ello, creen que es mejor seguir adelante con el calendario, permitiendo la recaudación de fondos para los afectados y promoviendo donaciones en medio de la cobertura masiva que genera cada jornada de La Liga.

Si bien LaLiga ha asegurado que la decisión no está basada únicamente en la saturación del calendario, este es un tema que también flota en el ambiente. Con el calendario ya ajustado por otras competiciones y compromisos internacionales, detener completamente una jornada supondría reprogramar un gran número de encuentros en una temporada que ya enfrenta muchas limitaciones de tiempo.

La Liga ha destacado que se trata de una industria compleja, con miles de personas trabajando en diferentes niveles y una gran inversión económica en cada jornada. En este contexto, consideran que detener la competición a nivel nacional podría perjudicar tanto el sector como las ayudas y donaciones, y por ello decidieron mantener el calendario, pero a la vez activar una campaña de apoyo a las víctimas.

Para apoyar de manera directa a las víctimas de las inundaciones, LaLiga ha lanzado una campaña en colaboración con Cruz Roja, con el objetivo de recaudar fondos para las familias y comunidades afectadas. Además, cuando las condiciones lo permitan, LaLiga y los clubes planean hacer un censo de los campos de fútbol dañados en la región, con la intención de contribuir a su reconstrucción. Esta iniciativa no solo busca restaurar los espacios de recreación y deporte en las comunidades afectadas, sino también ofrecer a los niños y jóvenes un lugar donde puedan volver a jugar al fútbol, simbolizando la esperanza y la recuperación.