La experiencia demuestra cómo la creatividad tecnológica puede transformar una escena cinematográfica emotiva en una herramienta de conservación efectiva.
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ha comenzado a usar drones que reproducen una intensa escena argumental con la voz de Scarlett Johansson y Adam Driver, tomada de la película Marriage Story, para espantar lobos que atacan al ganado en Oregón.
La novedosa estrategia de control no letal, denominada "wolf hazing", incorpora drones equipados con cámaras térmicas y altavoces que emiten sonidos perturbadores —desde detonaciones y fuegos artificiales hasta música de AC/DC y Five Finger Death Punch— junto a la discusión cargada emocionalmente entre Johansson y Driver en Marriage Story.
Según informes de The Wall Street Journal, los drones patrullan zonas de pastoreo en la cuenca de Klamath (sur de Oregón). Ante la detección de lobos, se les proyecta con un foco y se reproduce el audio disruptivo para disuadirlos de acercarse.
El supervisor del USDA en Oregón, Paul Wolf, destacó que "se busca que los lobos entiendan que los humanos son peligrosos". Los resultados han sido significativos: tras 20 días sin el sistema donde murieron 11 cabezas de ganado, en los 85 días siguientes con los drones activos, solamente dos animales fueron atacados.
Este método surge como alternativa viable ante las restricciones legales de control letal sobre el lobo gris, especie previamente protegida y catalogada como en peligro en diversas zonas de Estados Unidos.
La experiencia demuestra cómo la creatividad tecnológica puede transformar una escena cinematográfica emotiva en una herramienta de conservación efectiva. Al convertir el poder disruptivo de una discusión actoral en un disuasorio ecológico, el USDA abre paso a métodos no letales que podrían marcar tendencia en la gestión de fauna salvaje y la protección del ganado.
¿De qué trata Marriage Story?
La película Marriage Story es un drama dirigido y escrito por Noah Baumbach, estrenado en 2019. Está protagonizada por Scarlett Johansson y Adam Driver, quienes interpretan a una pareja en proceso de divorcio.
La historia gira en torno a Charlie (un director de teatro en Nueva York) y Nicole (una actriz que ha trabajado con él en su compañía), quienes atraviesan una separación complicada. Aunque en un inicio intentan mantener el proceso de forma amistosa —sobre todo por el bienestar de su hijo Henry—, la situación se vuelve cada vez más tensa y dolorosa cuando entran en juego abogados, mudanzas, heridas del pasado y emociones reprimidas.
La película retrata de forma íntima y honesta cómo el amor puede transformarse, cómo se deteriora una relación a pesar del cariño que aún puede existir, y cómo el divorcio puede ser tan trágico.
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