En un emotivo funeral privado, familiares y amigos han dado su último adiós a Liam Payne, quien murió el 16 de octubre tras caer del tercer piso de un hotel en Argentina.
La ceremonia se celebró en la iglesia St Mary the Virgin en Buckinghamshire, Inglaterra. Harry Styles, Zayn Malik, Louis Tomlinson y Niall Horan llegaron para despedir al cantante.
El lugar fue expresamente decorado con unas bonitas rosas blancas y fue un momento cargado de emoción para todos los presentes.
Su féretro azul oscuro con asas de plata y coronado con las mismas rosas que han adornado el templo llegó en un llamativo carro fúnebre tirado por un par de caballos blancos.
La ubicación del funeral no se hizo pública de antemano para evitar una gran multitud, aunque aún así decenas de personas locales y fanáticos se reunieron cerca.
Todo se puso silencio cuando los padres de Payne, Geoff y Karen, salieron de un coche para estar junto al carruaje, que estaba adornado con tributos florales que leían “Hijo” y “Papá”.
Payne tenía un hijo de 7 años, Bear, con la cantante Cheryl Tweedy.
La muerte del cantante
El pasado 16 de octubre, Liam Payne cayó desde el tercer piso del hotel CasaSur en Buenos Aires, donde se había quedado después de asistir al concierto de su amigo y excompañero de banda Niall Horan.
Lo que comenzó como una escapada tranquila con su prometida, Kate Cassidy, terminó en una tragedia que aún mantiene a su entorno buscando respuestas y enfrentando un duelo profundamente personal.
Las autoridades argentinas revelaron posteriormente que Payne tenía en su organismo alcohol, cocaína y un antidepresivo recetado en el momento de su muerte, una combinación que habría contribuido a su estado de vulnerabilidad.
Tres personas enfrentan actualmente cargos preliminares por “abandono de persona seguido de muerte” y por “suministro y facilitación de estupefacientes”, según lo informado por el fiscal Andrés Esteban Madrea.