¿Estás buscando un labial que resista comidas, bebidas y besos? Con solo unos pasos conseguirás un acabado impecable y duradero.
Hoy descubrirás cómo preparar tus labios, qué productos utilizar y cómo aplicarlos correctamente para lograr un resultado profesional.
Desde la elección del producto adecuado hasta la técnica de aplicación, el truco está en los detalles.
Si ya te cansaste de tener que estarte retocando constantemente, te compartimos los secretos y trucos de los profesionales del maquillaje.
Sella tu lipstick con estos pasos:
- Prepara tu boca: Para lograr un acabado impecable y duradero, comienza por tratar tus labios.
Hidrata con un bálsamo labial para suavizar y acondicionar. Esto no solo mejora la apariencia de tus labios, sino que también ayuda a que el color se adhiera de manera más uniforme.
Complementa tu rutina con una exfoliación semanal para eliminar las células muertas y revelar unos labios suaves y lisos.
- Crea la base perfecta: Una prebase o una ligera capa de base de maquillaje sobre los labios proporciona una superficie uniforme.
Después define la zona, el delineador de labios no solo marca la forma de tus labios, también actúa como una barrera que evita que el color se corra o se desvanezca.
Rellenar tus labios completamente con un delineador del mismo tono o uno ligeramente más claro intensificará el color y asegurará un acabado duradero.
- Aplica el color: Para un acabado natural y duradero, aplica el labial mediante suaves toques con la yema de los dedos o una brocha.
- El truco final para sellar: Para fijar el color y prolongar su duración, aplica una capa de polvos translúcidos después de retirar el exceso de labial con un pañuelo de papel.
Esta técnica de sellado absorbe la humedad y crea una barrera protectora que evita que el color se desvanezca.